Ciudad de México.- La Sonora Santanera, Patrimonio Cultural Vivo de la Ciudad de México, celebró sus setenta primaveras la noche del domingo en el Auditorio Nacional, donde el combo, dirigido por Gilberto Navarrete, convirtió al recinto en sitio de nostalgia con la interpretación de canciones que ahora son la banda sonora de la sociedad mexicana, incluída ‘La Boa’, pieza que le dio la personalidad, y que fue cerrajazo de una fiesta conmovedora que se inició con un vídeo homenaje al fundador, Carlos Colorado.
La canción, cantada a todo diafragma por el respetable, fue la materia para que los gustosos cantaran y bailaran una pieza con sustancia única.
Gilberto Navarrete, Juan Carlos Navarrete, César Chaim, Luis Eduardo Chávez, Eliezer Flores Ricardo Hernández, Iván Navarrete, Daniel Navarrete, Eleazar Chávez, y por supuesto la poderosa voz de María Fernanda, miembros de la Santanera en incitados, hicieron recordar a ese México bohemio, cómo en su tiempo lo hizo Carlos Colorado y sus músicos e intérpretes tradicionales como Juan y José Bustos, Silvestre Mercado y Andrés Terrones.
Iniciaron con un popurrí santanerismo pleno de energía. Un grupo de bailarinas (que cambió de vestuario varias veces) ambientaba el escenario como si fuera un cabaret, ecosistema en el que la Santanera se desarrolló en sus primeros. Imágenes vintage en una pantalla gigante adentraba en un viaje urbano, lleno de perfumes intensos.
Y se comenzaron a escuchar Por las calles de México y El Ladrón y el recorrido retro, de una vida nocturna.
Salió la cantante oficial del grupo María Fernanda, quien presentó a Carlos Cuevas; este interpretó Amor perdido. Siguió Justin Morales, quien soltó Amor de cabaret.
Sin César el ágape, se escuchó otro popurrí de cumbias con Tarde playera y Sombrita de cocales.
Vinieron Tres palabras y Solamente una vez, con Las voces de la Arrolladora y Montero.
Ofrecieron otro medley con las canciones como El nido, Ya no vuelvas conmigo y Corazón de acero. Las cantantes fueron Rossy Arango, Regina Orozco, Sandra Itzel y Marifer, las cuales recordaron a la gran cantante Sonia López.
Luis Eduardo Chávez tomó el proscenio para interpretar un cóctel romántico con Te extraño mucho y
Lo siento por ti...
La cumbia sonó de nueva cuenta con el grupo Trex, que cantó con los santaneros un tema nuevo, Lo quiero. También estuvieron los cantantes de la orquesta de Pérez Prado con Ya lo pagarás.
Eliezer Flores, uno de los solistas santaneros, tomó su turno al frente del tablado con fragmentos musicales con Mariposa fugaz, Vergüenza y Congoja.
La Santanera compartió el festejo con más invitados como el rapero C-Kan que cantó Mi barrio; Gala Montes, que interpretó Estoy pensando en ti. También el colombiano Danny Frank hizo lo suyo con La cumbia del torero.
Hicieron una pausa para reconocer a la viuda de Carlos Colorado, Yolanda Almazán y a toda su familia. Doña Yolanda agradeció al director del grupo Gilberto Navarrete, quien dijo que "La Sonora Santanera es de México".
Trajeron al concierto la voz de Paquita la del Barrio con un vídeo que sirvió de voz principal; ellos tocando Mi razón.
Siguió la fiesta con A muchos años y El trompetista, interpretado por su autor, José Cantoral, quien regaló asimismo Los aretes de la luna.
El mudo y Mi enemigo es el amor fueron sonadas por el cantante Pancho Barraza. Carolina Rosse sonó Mi pena. A Vadhir Derbez tocó Luces de Nueva York.
Vino un final falso. Regresaron con Bombero quiña quiña, Musita, Perfume de gardenia, Enemigos hasta la llegada del colofón La Boa, y la energía que emanó el grupo desde el inmueble de Reforma pudo llegar con corrientes de amor musical hasta La Barra de San Anna, pueblo de Tabasco donde Carlos Colorado Vera escuchó por primera vez la música del cielo que compartió está noche, desde otro plano, a los capitalinos santaneros.
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